V Domingo del Tiempo Ordinario

Evangelio(Mc 1, 29-39)

En aquel tiempo, al salir Jesús de la sinagoga, fue con Santiago y Juan a casa de Simón y Andrés. La suegra de Simón estaba en cama con fiebre, e inmediatamente le hablaron de ella. Él se acercó, la cogió de la mano y la levantó. Se le pasó la fiebre y se puso a servirles. 

Al anochecer, cuando se puso el sol, le llevaron todos los enfermos y endemoniados. La población entera se agolpaba a la puerta. Curó a muchos enfermos de diversos males y expulsó muchos demonios; y como los demonios lo conocían, no les permitía hablar. 

Se levantó de madrugada, cuando todavía estaba muy oscuro, se marchó a un lugar solitario y allí se puso a orar. Simón y sus compañeros fueron en su busca y, al encontrarlo, le dijeron: «Todo el mundo te busca». Él les respondió: «Vámonos a otra parte, a las aldeas cercanas, para predicar también allí; que para eso he salido». Así recorrió toda Galilea, predicando en las sinagogas y expulsando los demonios.

Santa Faustina anotó en su Diario (D. 450)

“Oh, que dulce es trabajar por Dios y para las almas. No quiero descansar en el combate, sino que lucharé hasta el último soplo de vida por la gloria de mi Rey y Señor. No rendiré la espada hasta que me llame delante de su trono; no temo los golpes porque Dios es mi escudo. El enemigo debe tener miedo de nosotros y no nosotros del enemigo. Satanás vence solamente a los soberbios y a los cobardes, porque los humildes tienen la fortaleza. Nada confunde ni asusta a un alma humilde. He dirigido mi vuelo hacia el ardor mismo del sol y nada logrará bajármelo. El amor no se deja encarcelar, es libre como una reina, el amor llega hasta Dios”.

 

  • ¿A quién o a qué le tienes miedo?

  • ¿Invitas a Jesús a tus miedos?

  • Jesús está lleno de bondad y de misericordia ante cada necesidad humana. Hoy, en oración, trata de revelarle aquello que temes e invítalo a toda la oscuridad y a los sufrimientos que experimentas. Jesús viene hoy a ti para liberar tu corazón y encenderlo con el fuego de su amor. Confía en Él.